Te has puesto a pensar, cómo sería este mundo si todos nos respetáramos? Definitivamente, reinaría la paz, pero.
Por qué no lo hacemos?
Respetar es reconocer los derechos de los demás. Actitud que poco a poco se ha ido perdiendo en las nuevas generaciones que son poco tolerantes y que muchas veces no les gusta seguir normas, obedecer a sus papás y maestros o aceptar un punto de vista diferente. Ser respetuoso es darle su lugar a las otras personas. Es permitir que te orienten, que te guíen. Es aceptar que, de vez en cuando, te jalen las orejas y quedarte tranquilo, reconociendo tu error y aprendiendo de esa experiencia.
Es triste ver a los jóvenes gritar con coraje a sus padres por algún permiso que se les ha negado; verlos enfurecidos con sus maestros porque les pescaron haciendo trampa en un examen; ó que se rían de los comentarios de sus abuelos por ser del siglo pasado.
El respeto exige la comprensión del otro. Ponerse en sus zapatos, implica tratar de comprender su posición. No basta solamente con no agredirlo o ignorarlo, implica escucharlo con atención y sin el ánimo de cuestionar sus ideas y abiertos inclusive a aceptar la posibilidad de replantear las nuestras.
El respeto hace una diferenciación total entre la persona y lo que ésta piense o diga en un momento dado. Nos lleva a aceptar nuestras diferencias personales, recordando que cada uno de nosotros tiene derecho a ser quien es. Debemos recordar que cada ser es único y esta hecho a imagen y semejanza de Dios, por lo tanto merece nuestro respeto y consideración.
Recuerda que es durante nuestra infancia, cuando comenzamos a incorporar los valores esenciales. En el proceso de enseñar a tu hijo como vivir, tu ejemplo es determinante. Eres tú quien enseña a tus hijos a través del respeto hacia ellos, de qué manera ellos te respetarán a ti y a otros. La próxima vez que vayas a entrar a su cuarto, toca la puerta antes de hacerlo; de esa manera, él tocará a tu puerta antes de entrar. Cuando actuamos con respeto hacia los demás, nos volvemos más tolerantes, pacientes, comprensivos, cumplidores y responsables de nuestra participación en el mundo, y cuando nos volvemos respetuosos de nosotros mismos, establecemos límites con seguridad, nos valoramos más y confiamos en nuestra capacidad.
El respeto es aceptar y comprender tal y como son los demás, aceptar y comprender su forma de pensar aunque no sea igual que la nuestra, aunque según nosotros esta equivocado, pero quien puede asegurarlo por que para nosotros; esta bien los que están de acuerdo con nosotros, y si no lo están; creemos que ellos están mal, en su forma de pensar, pero quien asegura que nosotros somos los portadores de la verdad, hay que aprender a respetar y aceptar la forma de ser y pensar de los demás. Pero no solo a las personas se les debe el respeto más profundo sino todo aquello que nos rodea, a las plantas y animales, a los rios, lagos y mares. Todo como parte de la creación se lo merece.
Respetar es aceptar y comprender al humilde y al engreído, al pobre y al rico, al sabio y al ignorante. Respetar es comprender su forma de ser pues cada ser humano se merece toda tu atención, no importando su condición. Cada quien es un alma libre y tú al igual que los demás debes de darle el derecho del libre albedrío a esa alma, en el camino de la evolución debe recorrer su propio camino, mira que grande es Dios como quiera que lo concibas. El deja que actúes a tu completa libertad, te respeta como lo más sagrado, tuya es toda la libertad de actuar a tu propia decisión y sabiendo de antemano las consecuencias de tus actos, por eso no es propio reclamarle a Dios por que nos castiga cuando obramos mal, analizenlo.
El respeto exige un trato amable y cortés; el respeto es la esencia de las relaciones humanas, de la vida en comunidad, del trabajo en equipo, de la vida conyugal, de cualquier relación interpersonal. El respeto es garantía absoluta de transparencia.
El respeto crea un ambiente de cordialidad y seguridad; permite la aceptación de las limitaciones ajenas y el reconocimiento de las virtudes de los demás. Evita las ofensas y las ironías; no deja que la violencia se convierta en el medio para imponer criterios. El respeto conoce la autonomía de cada ser humano y acepta complacido el derecho a ser diferente.
El respeto es la posibilidad de aceptar tus defectos y tus virtudes sin poner en tela de juicio lo que ves en los demás, porque jamás obtendrás de otros lo que no eres capaz de darte tu mismo, ya que en la medida que lo logres serás capaz de otorgarlo a los demás.
El respeto es el reconocimiento del valor inherente y de los derechos innatos de los individuos y de la sociedad. Estos deben ser reconocidos como el foco central para lograr que las personas se comprometan con el propósito mas elevado en la vida.
Por qué es importante respetarse unos con otros?
Porque las diferencias del mundo, un planeta rico en pensamientos, opiniones y perspectivas. Sería muy aburrido que todos pensaran igual.
Para crear una atmósfera de paz y armonía.
Porque si nadie aceptara las diferencias con las demás personas, no podrían relacionarse ni convivir en orden y armonía.
Por el simple hecho de que todos, por ser seres humanos, tienen el derecho de ser respetados.
Para obtener respeto por parte de los que te rodean, es imprescindible que tú los respetes del mismo modo. Nunca exijas algo que no puedas dar.
Respeto a tus padres
Una de las figuras más importantes que tienes son tus padres. Ellos te han educado y te han convertido en la persona que hoy eres. Bien o mal, han puesto su mejor empeño por darte lo mejor y estar siempre cuando los has necesitado. Si en más de una ocasión has intentado llegar a un acuerdo con ellos y terminan gritándose y faltándose al respeto, aquí hay algunas formas para comunicarte con ellos sin llegar a discutir:
Escúchalos: Presta real atención a lo que te están diciendo. La experiencia que ellos tienen, los hacen tomar ciertas decisiones.
Comunica tus razones: Si en algo no estás de acuerdo, de manera tranquila, expón las razones por las cuales piensas que puedan estar equivocados.
No alces la voz: Por el simple hecho de ser tus padres, merecen respeto; aunque te sientas muy molesto, no levantes la voz. De lo contrario, es seguro que toda su plática terminará en pleito.
No pierdas tiempo en discusiones sin sentido. Es normal que en todas las relaciones existan diferencias, pero lo más importante es el cariño que existe entre ustedes.
Respeto al planeta y los animales
Cuando se habla de respeto, siempre se piensa que sólo se refiere a personas, pero siempre se deja a un lado a la naturaleza y a los demás seres vivos. Ellos son parte del mundo y deben ser respetados al igual que cualquier otro integrante de éste.
Si eres de los que está preocupado por el bienestar tanto de animales como de la naturaleza, tú puedes fomentar su respeto mediante:
La unión a grupos que se dediquen a la preservación de la naturaleza. En el caso de los animales, existen asociaciones protectoras de éstos.
Si tienes alguna mascota, protégela, atiéndala y procura su bienestar. Ésta es la mejor forma de respeto que puedes brindarle.
No tires basura ni hagas cosas que pueden ir en contra de la protección a los espacios libres. Este mundo es de todos, respétalo.
Respeto a las diferentes razas
Existen millones de personas dentro de este mundo que, por su pasado cultural, piensan, opinan y actúan diferente. Es necesario que entiendas que las diferencias pueden ser inmensas pero eso no te da el derecho de faltarle el respeto. Muchos de los pleitos entre países tienen que ver con este tipo de diferencias. Es impresionante cuántas cosas se podrían evitar si la gente supiera comunicarse y entender las diferencias. Si quieres conocer más de personas que vivan en otro lado del mundo puedes: Investigar en Internet. Hay muchos sitios que te hablan sobre otras culturas y costumbres. Chatear con gente de otros países, también es una opción para entender mejor las tradiciones de otras personas. Viajar puede ser una buena y divertida forma de comprender el porqué de muchas actitudes de personas de diferentes lugares.
Respeto a ti mismo
Y la forma más importante de respeto es la que le debes a tú persona. El respeto a los demás comienza por ti mismo. Es primordial que descubras lo mucho que vales por el simple hecho de estar en este mundo.
La mayor parte de las personas suele faltarse al respeto en algún momento. Entre las formas más comunes de falta de respeto están:
Insultarte porque algo te salió mal. Eres un ser humano, no eres perfecto. Disculpa tus errores y aprende de ellos.
No cuidar tu salud física. Exponerte a actividades peligrosas sin protegerte, también es una forma de no demostrarle a tu cuerpo cuánto lo quieres.
Menospreciar tus logros. Cuando alcances una meta, siéntete orgulloso de ti mismo, no hagas menos tus esfuerzos.
Si no te respetas a ti mismo, es muy improbable que puedas respetar a los demás. Crea una armonía con tu persona y podrás crearla con todas las personas que te rodean.
No permitas que nadie te haga menos, tú vales muchísimo y mereces ser tomado en cuenta por todas las opiniones. Lo que piensas es importante y puede ser de mucha ayuda para los demás. No tengas miedo de expresar si algo no te parece. Pero recuerda, siempre con respeto.
El respeto, debe ser nuestra mejor relación con los demás, sería una agradable forma de conducirte por la vida, pero aunque no lo parezca, respetar a los demás es relativamente difícil. Tal vez por la forma en que se nos ha enseñado a relacionarnos con los demás, que a veces tritura esta virtud desde sus comienzos, pero trata de cultivar en tu corazón el respeto, poco a poco, aliméntalo con el ejercicio constante del mismo, y verás lo bien que te sentirás contigo mismo, a veces tambalearás, y pensarás que no lo lograrás, pero manténte firme, y al final Dios sabrá recompensar tu esfuerzo, hay tanto en la palabra respeto y en su ejercicio, que preferiría lo meditaran ustedes mismo y sacaran sus propias conclusiones.
Que alguien tenga un defecto, que diga o haga cosas improcedentes no lo condena como persona, siempre podemos recapacitar o cambiar nuestra actitud o comportamiento. Por lo tanto, no rechaces, discrimines o maltrates a otros porque no hacen lo que tú deseas o esperas, ten más paciencia y comprensión. Sólo somos diferentes en lo fisíco. Llegamos a este mundo con limitaciones y condiciones más o menos difíciles para superar, resolver y de las cuales aprender, en eso radica todo. Acepta a los demás con sus defectos y cualidades sin juzgarlos con ligereza.
Algunos textos fuerón substraidos del Artículo de Practica El Respeto por The New York Times.